1 Señor, acuérdate de David
y de toda su aflicción;
2 cómo juró al Señor,
y prometió al poderoso de Jacob:
3 No entraré en mi casa,
ni subiré a mi lecho,
4 no daré sueño a mis ojos,
ni reposo a mis párpados,
5 hasta que halle un lugar para el Señor,
una morada para el poderoso de Jacob.
6 Encontramos la morada en Efrata,
la hallamos en el campo de Jaar:
7 Vamos a su morada,
postrémonos ante su estrado.
8 Levántate, Señor, y ven a tu reposo,
tú y el arca de tu poder.
9 Tus sacerdotes se revistan de justicia,
y tus santos canten de júbilo.
10 Por amor a David, tu siervo,
no rechaces el rostro de tu ungido.
11 El Señor juró a David
una promesa firme que no retractará:
Una de tus descendientes
sentaré en tu trono.
12 Si tus hijos guardan mi pacto
y mis testimonios que les enseño,
también sus hijos se sentarán en tu trono
para siempre.
13 Porque el Señor ha elegido a Sión,
la ha deseado para su morada:
14 Este es mi lugar de reposo para siempre,
aquí habitaré, porque lo he deseado.
15 Bendeciré sus provisiones con abundancia,
a sus pobres saciaré de pan.
16 A sus sacerdotes vestiré de salvación,
y sus santos cantarán de júbilo.
17 Allí haré brotar el poder de David,
he preparado una lámpara para mi ungido.
18 A sus enemigos les cubriré de vergüenza,
mientras en él resplandecerá su corona.
¿Cuál es el contenido del Salmo 132 en la Biblia?
El Salmo 132 es uno de los Salmos de la Biblia, perteneciente al Libro de los Salmos. Este Salmo es conocido como uno de los Salmos de Ascent, es decir, aquellos que se recitaban en las peregrinaciones a Jerusalén.
El contenido del Salmo 132 es una oración de súplica y alabanza dirigida a Dios por la promesa hecha a David de que su descendencia reinaría para siempre en Israel. El Salmo comienza con una invocación a Dios para que recuerde la promesa hecha a David:
«Acuérdate, oh Jehová, de David, y de todas sus aflicciones.»
Luego, el Salmo continúa con la descripción de la promesa hecha a David, en la que se le aseguraba que siempre habría un descendiente suyo en el trono de Israel:
«Juró Jehová a David verdad, y no la revocará: De tu descendencia pondré sobre tu trono.»
El Salmo expresa la esperanza de que Dios cumpla su promesa y restaure a su pueblo, y termina con una oración por la bendición de Dios sobre el templo que se construirá en honor a su nombre:
«Porque Jehová ha elegido a Sion; La quiso por habitación para sí. Este es mi reposo para siempre; Aquí habitaré, porque la he querido. Bendeciré abundantemente su provisión; A sus pobres saciaré de pan. Asimismo vestiré de salvación a sus sacerdotes, Y sus santos darán voces de júbilo.»
En resumen, el Salmo 132 es una oración de súplica y alabanza dirigida a Dios por la promesa hecha a David de que su descendencia reinaría para siempre en Israel y por la construcción del templo en honor a su nombre. Este Salmo es una muestra de la confianza en la fidelidad de Dios y su poder para cumplir sus promesas.
El Salmo 132 en la Biblia es un himno que celebra la presencia de Dios en el Templo de Jerusalén y en la dinastía de David. Este Salmo es conocido como el Salmo de la Alianza o el Salmo de la Promesa.
Los versículos más relevantes del Salmo 132 son:
- – Versículo 1: «Señor, acuérdate de David y de todas sus dificultades».
- – Versículo 5: «Hasta que encuentre un lugar para el Señor, una morada para el Poderoso de Jacob».
- – Versículo 7: «Entremos en su morada, postrémonos ante el estrado de sus pies».
- – Versículo 8: «Levántate, Señor, y entra en tu reposo, tú y el arca de tu poder».
- – Versículo 13: «Porque el Señor ha escogido a Sión, la ha deseado como su morada».
Este Salmo es una oración que expresa la confianza en la fidelidad de Dios y su compromiso con su pueblo elegido. El Salmo 132 es utilizado en las liturgias de muchas iglesias, y es considerado como una expresión de fe y esperanza en la promesa de Dios.
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