Oh Señor, no me reprendas en tu enojo,
ni me castigues con tu ira.
Ten piedad de mí, Señor, porque estoy enfermo;
sana mi cuerpo, porque mi alma está angustiada.
Mi vida está llena de dolor y aflicción,
porque he pecado contra ti, Señor.
Mis enemigos se burlan de mí,
y dicen que no habrá salvación para mí.
Pero yo confío en tu amor y misericordia,
y sé que tú me perdonarás.
Concédele a mi alma la paz que tanto anhelo,
y haz que mi corazón se llene de alegría.
Escucha mi clamor, Señor,
y atiende a mi súplica.
No me abandones en mi hora de necesidad,
porque tú eres mi refugio y mi fortaleza.
Bendito sea el Señor, quien escucha mis oraciones
y me da la fuerza para seguir adelante.
Que su amor y su bondad me acompañen siempre,
y que yo pueda alabar su nombre por siempre jamás. Amén.
¿Cuál es el contenido del Salmo 6 en la Biblia?
El Salmo 6 es uno de los salmos penitenciales que se encuentra en el Libro de los Salmos de la Biblia. Este salmo es conocido por su tono de arrepentimiento y súplica a Dios por misericordia y perdón.
El Salmo 6 comienza con una oración de David pidiéndole a Dios que no lo reprenda en su ira ni lo castigue en su enojo. David se siente abrumado por sus pecados y su dolor espiritual es tan intenso que incluso su cuerpo está enfermo y su alma está angustiada.
En la segunda parte del Salmo 6, David se vuelve hacia Dios y le suplica que tenga misericordia de él y lo sane de su enfermedad espiritual. David reconoce que solo Dios puede salvarlo y lo invoca para que lo libere de sus enemigos y lo haga prosperar.
Finalmente, el Salmo 6 termina con una nota de confianza en Dios. David afirma que sabe que Dios ha escuchado su oración y que responderá a su súplica. David se regocija en la bondad de Dios y lo alaba por su fidelidad y amor eterno.
En resumen, el Salmo 6 es un llamado a la misericordia y al perdón de Dios en momentos de dolor espiritual y arrepentimiento. A través de este Salmo, David nos muestra que incluso en nuestros momentos más oscuros, podemos confiar en la bondad y fidelidad de Dios para sanarnos y guiarnos hacia la luz.
El Salmo 6 es una oración de súplica y lamento de un creyente que se siente abrumado por la aflicción y la enfermedad. El salmista clama a Dios por su misericordia y ayuda en medio de su dolor y angustia.
Los versículos relacionados con el Salmo 6 son:
- «Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy enfermo; sáname, oh Jehová, porque mis huesos se estremecen» (versículo 2).
- «Todo mi ser está muy agitado; pero tú, oh Jehová, ¿hasta cuándo?» (versículo 3).
- «Vuelve, oh Jehová, rescata mi alma; sálvame por tu misericordia» (versículo 4).
- «Porque no hay en la muerte memoria de ti; en el Seol, ¿quién te alabará?» (versículo 5).
- «Me he desfallecido a causa de mi gemido; todas las noches inundo de llanto mi lecho, riego mi cama con mis lágrimas» (versículo 6).
- «Mis ojos se han consumido de tristeza; han envejecido a causa de todos mis adversarios» (versículo 7).
- «Apártense de mí todos los que hacen iniquidad, porque Jehová ha oído la voz de mi lloro» (versículo 8).
